Esme: ¿se puede saber cuándo vuelves?
Eva: hola, Esme, feliz Año Nuevo
Es: déjate de felices y de años, no seas obvia, y vente mañana para la empresa que el trabajo nos reclama/p>
Ev: tengo vacaciones hasta después de Reyes
Es: será con Patricia pero conmigo no, ¿tú te crees que unas emprendedoras de reciente creación se pueden permitir esos lujos?
Ev: está lloviendo y no vamos a hacer nada y tengo al Toni lesionado, con una bolsa de hielo en cada rodilla
ES: no te vale ni para el ocio ni para el negocio, je, je, je.
EV: muy graciosa, ¿qué tal tus Navidades?
Es: quiero divorciarme de mis hijos ¿se puede?
EV: me parece que no, ¿por?
ES: me tienen la casa que ni los del síndrome de Diógenes, entre otros motivos.
EV: no sé qué es eso
ES: pues bien que te haces la culta en el blog, citando a diestro y siniestro, reconoce que metes una cita cuando no se te ocurre nada
EV: qué borde empiezas el año pero te perdono porque me lees ,aunque sea para criticar
ES: solo por encima, no te hagas ilusiones. Y ya que no vienes ve pensando algo para el negocio. Yo ya he tenido una idea.
EV: ¿otra?
ES: bueno, se la he copiado a los de Amazon . Drones, vamos a meter drones.
¿Con quién te escribes tanto?, me pregunta el Toni contemplando melancólico el paisaje lluvioso y desolado. Con una loca, le contesto mirando las brumas.