Que no, que todavía no me voy ni se ha muerto nadie de los que circulan por aquí, por el momento. Es que eso es lo que dicen mis amigas del mercado (por llamarlas de alguna inexacta manera) que tengo que hacer, ir cerrando el puesto y redactar la última entrada.
Resulta que me dispongo a hacer los recados hortifrutícolas muy tranquila y confiada cuando una voz acostumbrada a los gritos me interpela: eh, tú, empleada doméstica, ¿pero es que no te cansas, hija? Que aburres a las ovejas, apostilla otra voz.
Claro, ya no me acordaba yo de la Elvira (de frutas Elvira y autora del «blog de una frutera desquiciada») ni de su amiga Marcela ( adicta a las peras y ejecutanta de otro blog que no sé cómo se llama pero sí sé que es de citas literarias).
Vente pa cá, hermosa y no quieras huir de nuestro asesoramiento bloguero que, por ser tú y si tu compra supera los veinte euros, te vamos a hacer gratis, me dice la Elvira acomodando judías verdes en un montón (las pochas detrás y las relucientes delante).
Eso, no seas cobarde, que te hemos estado siguiendo este verano y tenemos unas cuantos consejos que darte, añade la Marcela apuntándome con una rama de apio.
En realidad es sólo un consejo muy básico pero certero: cierra el blog o te arrepentirás.
A mí eso me suena a amenaza más que a consejo, respondo deteniendo mi carro.
Lo decimos por tu bien, es para que no te quemes, que ya te estás acercando a ese punto en el que uno empieza a repetirse, a ser pesado, a no sorprender y la gente pincha, bosteza y pasa de largo.
Pero si no llevo tanto tiempo, ni siquiera llevo un año.
Eso da igual, escribes mucho y esa es tu perdición. Llévate unos kiwis que los tengo de de oferta y van muy bien para el tránsito.
Un buen post póstumo y zanjas tus aventuras antes de que no te lea nadie.
Mejor irse de la fiesta antes de que acabe que convertirse en ese pesado borracho que se queda a dormir en el sofá, sugiere la Marcela.
Haz caso a esta que sabe latín. Póstumo post, ese es nuestro consejo y son cinco euros que tu compra no ha llegado a los veinte.
Pero bueno, ¿y por qué no cerráis vosotras los vuestros?
Anda esta, pues porque nosotras somos ya unas clásicas, estamos en otra categoría y, si me apuras, en otra dimensión blogosférica, no te quieras comparar. Y adiós, que se me aglomera el personal y me entra el estrés matinal. Ya la atiendo, señora, ¿ qué va a ser?
Póstumo post, se ponen ¿y si tienen razón?
El blog de una empleada doméstica 
¿Y si cierras como estrategia de marketing, qué leo yo ahora? ¿hacen falta las estrategias de marketing?
Todavía no me voy, esas dos son muy malas y muy envidiosas. Y gracias otra vez por estar ahí a diario aunque estoy segura de que encontrarías otro blog que echarte al cuerpo. Será por blogs….muchos besos, Patricia, eres majísima, que lo sepas.
Ese argumento es como cuando lo dejas con tu pareja, estás triste y te dicen «anda, que será por hombres en el mundo». Pues precisamente por eso, mira que hay blogs por ahí, pero de todos los del mundo, a mí me gusta este :-). No es tan sencillo engancharse….
Ni se te ocurra! Por aquí con fruta o sin ella, nos gusta vuestras andanzas.
Gracias, Cristina, qué rabia les va a dar a las fruteras cuando lo lean, porque lo leen, estoy segura 🙂
Un abrazo fuerte para mi querida piña, el pomelo mañanero y las fresas de capricho. Y que…¡vivan las fruteras! Muuuuak
Es magnífico repetirse, ser pesado y no sorprender. Porque es una gilipollez -además de imposible- eso de ser sublime sin interrupción.
La vida -escribir, leer y todas esas cosas- consiste en eso, en pinchar, bostezar y pasar de largo. Todos lo hacemos.
Pero hay quien se empeña en seguir pinchando en los mismos sitios, y aunque pase de largo, hay bostezos muy divertidos (y una forma de ver las cosas -una visión del mundo- cómplice y compartida)
Y si al final te decides a escribir ese póstumo post, tendrás que seguir escribiendo post mortem.
Jajaja, (suena a risa falsa pero me he reído de verdad), me ha gustado mucho lo de escribir post mortem.
Ni se te ocurra..tengo una suscripción vitalicia y si cierras te demando!
He dicho.
Esto parece el típico comentario de qué fea estoy hoy para que te contesten ¿qué dices?, si estás monííísima. Que todavía no me voy, que ya veo que me queréis un poco. Y tú, Marichollos, no me demandes que te temo.
Jajajaj. Me encantas eva, ya no podria pasar sin ti !
Entre tanto blog de maternidad, apego, crianza y teta..tu eres la única que pone cordura y color. Bueno..tu y el toni, y la patri, y el jacobin etc.
anda anda, a las que tenías que dar carpetazo es a esas dos! Bueno no, que son muy divertidas, jejejeje. En toda historia que se precie tiene que haber malvadas!
Las sacaría más pero no quiero abusar.
Llevo unos diez años escribiendo en un blog (bueno, en realidad tengo dos) y he visto algunos blogs que me parecían brillantes que, repentinamente, se han acabado. Y no sé si habrás sido porque la gente se cansa de escribir o porque llega un momento que no saben de qué escribir. Pero mantener un blog como el tuyo en el casi escribes a diario, y se nota que por gusto, me llama la atención. Pocas personas tienen una imaginación tan fértil.
También tengo mis bajones, ya no escribo a diario y además, desde que dejé de lado un tiempo la historia inicial, esta que estás leyendo tú, y empecé a escribir otras cosas, he perdido un poco de impulso. Alguna vez he pensado en cerrarlo pero luego, como me gusta escribir, pues sigo. Vaya rollo te he metido, perdón.
¿Tú tienes dos? Yo solo conozco uno. Llevar diez año, eso sí que me parece mérito y tenacidad.
Bajones, en esto de escribir (amén de en otras cosas), los tenemos todos. Pero iniciar un cuento nuevo (una entrada) tiene su aliciente, aunque a veces no sepas muy bien de lo que vas a escribir.
El otro blog sólo es para entradas muy breves de menos de cien palabras. En ese, en vez de Soros, me llamo Lan. Ahora hace un par de meses que no se me ocurre nada para cien palabras.
Si tienes curiosidad:
http://carlanca.blogspot.com.es/
Para rollos los que te dejo por aquí. Además comprendo que, a veces, ni te acuerdes de lo que escribiste y tengas que leerlo de nuevo para contestar. Eso si que es un tostón. Así que perdonémonos mutuamente.
Lan, pues me has dejado un comentario como Lan, o era otro que se llama igual que tú.
Fui yo.
Soros por duplicado!