Esta mañana he subido al autobús en dirección al quiosco donde malgasto mis días y los sustento a la vez (paradojas del laburo), he visto una plaza libre al lado de una señora y hacia ella he ido sin dudar. Todo normal hasta que, una vez sentada, he podido comprobar que mi compañera de autobús era una mujer fuertemente dominada por la energía oscura. Dicho de otro modo: se expandía como el Universo.
Como es lógico he hecho un trayecto muy incómodo porque su fuerza expansiva me empujaba peligrosamente hacia el pasillo y comprimía todo el lateral de mi cuerpo serrano. Al principio he luchado de manera sibilina empujando con mi antebrazo el suyo y tratando de recuperar el espacio que me pertenecía o que yo creía que me debía de pertenecer porque ella parecía creer lo contrario. Imposible, la energía oscura de esa mujer era muy superior a la mía así que me he dado por vencida y me he resginado a hacer mi recorrido habitual encajonada y acosada por la mujer altamente expansiva. Además, desprendía mucho calor o energía térmica.
Dirás que cuento tonterías que no te interesan nada y que mis problemas en el transporte público son de lo más banal. Espera, hombre o mujer, que todavía no he llegado al desenlace y esto sólo era un preámbulo. Aunque incómoda y cabreada he elaborado una nueva teoría digna de un blog tan serio y de tanto rigor científico como este. Paso a exponerla sin atisbo de rubor : creo que el problema del ser humano es que está dominado por esa energía oscura, es ella la que le impulsa a expandirse, a querer para sí más espacio y territorio y todos los recursos contenidos en él, a imponer su materia sobre la materia de otros. Y quién dice materia (lo digo yo, Esmeralda), dice ideas, comportamientos, religiones, maneras de vivir la vida o de entenderla.
De ahí vienen todos nuestros conflictos, peleas, guerras, de nuestras ansias expansivas y por ahí vendrá también nuestra ruina. Porque cuanto más nos expadimos más nos alejamos de los otros y solos estamos abocados al fracaso (me gusta esa frase). En cierto modo no es culpa nuestra, como hijos del Universo que somos copiamos el modelo paterno. Porque este tío que nos contiene no para de estirarse y estirarse. ¿Sabrá por qué y hacia dónde?
Yo ,no, pero la señora del asiento de al lado sí parecía tener claros sus objetivos. Qué viaje me ha dado la muy expansionista. Así le de un Big Rip.
Muy bien llevado el cabreo a la extrapolación filosófica a través de la teoría de la gorda expandida (metáfora)
No era gorda pero tenía mucha masa y la utilizaba a su favor
Ya ves, y sin embargo vemos a diario que la masa no vale para nada…Lo dejamos en obesa, que es politicamente más correcto
Anonadada me has dejado con tu teoría expansiva, no sabía yo que la Esme le pegaba también a la filosofía cuántica…y lo hacía tan bien
La Esme se atreve con todo y cuando se aburre ya ni te digo
¿entonces no hay solución? 😦
Tiene que haber algo más potente que la fuerza oscura. De no haberlo, ya estaríamos extinguidos.
eso me gusta más, compañera jedi 🙂
Esme hoy se ha superado a sí misma. Filosofía en estado puro y bofetón bien merecido en todos los morros. Si ni tan solo somos respetuosos en el autobús con el espacio vital ajeno, ¿cómo leches vamos a respetar cosas más importantes?
Pero de toda la entrada, me quedo con esta frase: “Donde malgasto mis días y los sustento a la vez”, tantas veces me corroe también a mí esta contradicción 😉
Sabía que me entenderías 🙂
😉 A veces soy muy Esme.
Y por supuesto, cuando una energía se expande otra se contrae, salvo que se expanda el recipiente, que no es el caso, je, je. De al para comenzar el día con una sonrisa (que también se contrae). Lado positivo: las posibilidades de que se repita no es muy grande. Feliz día con energia y sonrisa en expansión.
Mientras lo que se expanda sea la risa y la sonrisa todo irá bien.
Bueno, a veces la sabiduría acumulada provoca alguna otra expansión pero así hay que admitirlo, con alegría.
La Esme es una filósofa de las de verdad, de calle y quiosco. De las que observa lo variopinto y los descompone en partes sencillas hasta extraer un axioma. Maravillosa!!!
Cuidado con elogiar mucho a la Esme que se sube a la parra y luego no hay quién la baje de ahí. Después de leer tu comentario anda diciendo que es la nueva Kant de los suburbios. Y eso que en su vida ha leído a Kant 🙂
Kant???? No….le pega más ser Nietzsche, díselo de mi parte.
Exactamente. El afán conquistador del ser humano se traduce en todo. Desde el asiento del autobús o la cola del supermercado a religiones, países… Yo tengo fe en la gente pero a veces me da un poco de asquito, la verdad. Un besote!!!
Jajaja, me ha hecho gracia el final de tu comentario, me recuerda esa frase que no sé de quién es, que dice, “yo amo a la humanidad pero es que a la gente no hay quién la aguante”. Besos, Álter.
Joder, qué risa. Maldito universo sentado en tu autobús, ¿al final logró enviarte a una realidad alternativa o qué? XD
Jajaja, ni siquiera eso. No hubiera estado mal un viajecito de esos por el precio de un abono transporte. Con vuelta, claro!
Esto del lado oscuro me suena a Star Wars. Y como ahora está tan de moda, a lo mejor por eso la doña se dio esa extendida… Pero tienes toda la razón, mi querida amiga, por eso estamos como estamos. Porque todo el mundo quiere maaaaaaás. Si total, cuando nos morimos nada nos llevamos. Ya ni funerales hacen porque están muy caros. Te dan una cremadita y te ponen en una urna chiquitita y no más ahí te quedas, reducido a polvo. Ojalá y la gente empezara a pensar como tú. Menos expansión… ¡Coño!
Jajaja, eso mismo digo yo, total para morir al final a qué tanto acaparar, no tenemos perspectiva, leches!
Mira, yo he aprendido mucho con mi mamá. La pobrecita está en el hogar donde la cuidan, ¿y qué tiene allí? Su vida, porque ni memoria le queda. Tanto una aferrarse a los bienes materiales y al final de nada te sirven. No te dan vida, no te dan salud. No te dan nada. Y no es por ponerse una negativa. Para nada. La vida es maravillosa. Pero es que ese eso, la vida, lo que hay que disfrutar, amar, gozar. No perder el tiempo en odios, codicia, ni deseperos por tener cosas cuando no se puede. Después que podamos suplir lo básico y gozarnos lo demás, para qué tanta expansión, ¿no? Besos mi Eva.
Me gusta tu manera de pensar, Melba. Pero que mucho.
Esme, llevas muchísima razón. Cuanto más nos expandimos, más de vista perdemos el centro de equilibrio. Besicos para Eva y para ti.
Y tanto, Marififi. Se los doy de tu parte
Pues vas muy bien por ahí, creo yo. Los animales no tienen guerras porque sólo quieren lo que necesitan. Bueno, creo yo, repito.
Yo tampoco estoy segura de nada, es hablar por no estarme callada.